Somne [es]

[Wkr]

En Somne cada jugador representa un viajero onírico por Las Tierras del Sueño. Ambos son personajes melancólicos, soñadores contemplativos, con una sensible disposición a vivir en primera persona fenómenos extraños, conocedores de los peligros a los que se enfrentan, y con la suficiente valentía para luchar y derrotar a las criaturas horribles con las que se topen en sus viajes.

Se conocen hasta la fecha cuatro caminos por donde los mortales pueden adentrarse en las Tierras del Sueño: mediante un hechizo, o un artefacto como la llave de plata de Randolph Carter; que te encuentres (o tropieces) con un lugar donde las Tierras del Sueño se entrecruzan con nuestro mundo; que mueras, y si eres un soñador experto, decidas optar porque el espíritu de tu personaje resida eternamente en las Tierras del Sueño; o soñar, con o sin estimulación psíquica ni psicotrópica.

Para poder jugar a este juego necesitarás imprimir 6 hojas Din A4 en 6 colores diferentes, y usar 60 cubitos (10 de cada color).

Puedes seguir los progresos de este juego con el tag #Somne en twitter, o en esta entrada de mi blog: http://labsk.net/wkr/archives/15862/

Descargar print-and-play:
http://labsk.net/somne

[Wkr]

Una imagen de las pruebas de juego:
https://twitter.com/Wkr/status/458853583044493312

[Fran F G]

¿Tiene un aire a Mykerinos o soy yo que veo cosas donde no las hay?

[Wkr]

¿Tiene un aire a Mykerinos o soy yo que veo cosas donde no las hay?

Ostias, pues yo no le veo la similitud, pero si se parece fantástico, porque Mykerinos me encanta (es de mis juegos favoritos). La idea es que fuera un Battle Line (algo diferente) puestos a buscar similitudes.

[Fran F G]

Lo decía mirándolo sólo por encima, por los efectos de las cartas y porque las cartas en las que se ponen los cubos parecen versiones muy simplificadas de los tableritos del Mykerinos.

[Wkr]

Ah, pero lo que haces es llevarte los cubitos. Es al revés. Las cartas empiezan ya llenas y vas retirando. Y los que retiras te sirven de munición para pagar otras cartas. No se parece mucho, la verdad.